El médico de Michael Jackson se defenderá con la teoría del suicidio

El juicio por homicidio involuntario contra el médico de Michael Jackson, Conrad Murray, comienza el próximo 4 de enero, pero al parecer su defensa ya tiene preparada la hipótesis con la que intentará liberarlo de toda culpa. Según declaró el miércoles el delegado del fiscal de distrito, los abogados del médico dirán que el cantante se suicidó.

"No quieren decirlo directamente, pero esta es la dirección en la que irá su defensa", dijo David Walgren en la audiencia que se realizó para determinar si la defensa de Murray tendrá acceso a dos jeringas encontradas en el dormitorio de Jackson para examinarlas y utilizarlas como pruebas. Según la defensa de Jackson, las jeringuillas y un tubo intravenoso que se hallaron, no han sido adecuadamente examinados y podrían tener huellas del cantante.
Según uno de los abogados del médico, J. Michael Flanagan, "los oficiales debieron realizar un análisis cuantitativo" para determinar quién inyectó a Jackson la alta dosis de Propofol que le causó la muerte, ya que Murray niega haberle suministrado tanto anestésico como el que se encontró en su sangre.
En los días previos a la muerte del cantante, Murray estaba tratándolo por un problema de insomnio y, según las palabras de Flanagan, el 25 de junio le administró 25 miligramos de Propofol, cuando lo necesario para matar a una persona son por lo menos 150. La teoría de la defensa es que durante un breve momento en que el médico se ausentó del cuarto donde se encontraba Jackson, el cantante -desesperado por lograr dormir- pudo haberse inyectado él mismo más cantidad de medicamento.
El juez del Tribunal Supremo a cargo del caso, Michael Pastor, ha aceptado el argumento de Flanagan y permitido que se hagan pruebas a los implementos encontrados en la habitación del cantante. La fiscalía, sin embargo, piensa que esta nueva teoría de la defensa es "una cortina de humo". "Lo claro es que están operando bajo la hipótesis de que Michael Jackson se suicidó", dijo Walgren.